“¿Qué me sobra? Nada ¿Qué me falta? Todo”, dice Jésica Tritten, entre risas, ante la consulta de Página/12 sobre su nueva gestión al frente de los canales Encuentro, Pakapaka, DeporTV y la plataforma CONTAR. No se queja. “Tenemos un equipo relindo -- cuenta— y estoy feliz porque este lugar es mi casa, hay que reparar algunas cosas y con todo amor y compromiso lo voy hacer”, asegura.

Tritten trabajo en las señales desde que en 2004, el Estado comenzó a pensar en la función educativa de la TV, sin descuidar el entretenimiento. Y dejó el cargo en diciembre del 2015. “Pero nada de lo que paso estos años me es ajeno. Nunca me despegue de los canales, ni políticamente ni afectivamente”, sostiene hoy nuevamente al frente de ese polo productivo.

Su designación viene con doble función en Contenidos Públicos Sociedad del Estado: Vicepresidenta del directorio -su presidente es Claudio Martínez-, y gerenta general de las señales. Un rol exigido luego de la sistemática acción de desguace que impuso el macrismo. “Cuando (Hernán) Lombardi toma el control de los canales –relata Tritten- los saca del marco del Ministerio de Educación, crea Contenidos Públicos y los desarticulan en tres sedes: parte va a Tecnópolis, una parte queda acá en la Ex Esma, y los directivos van el CCK”.

-¿Usted tomo posesión del cargo en el CCK?

-No, vine directo acá. Nuestro hogar es este. El Espacio para la Memoria nos cedió el edificio en 2008 y lo hicimos de cero en función de los canales. Era fundamental venir aquí. Nuestros contenidos se vinculan a la memoria y a la historia reciente. Es un compromiso político y de Estado estar en la Ex Esma, por eso aunque estamos desordenados, estamos contentos de estar acá.

-¿Cuáles fueron las primeras acciones, en relación a la política de medios?

-Como línea política y de mandato, darle la tercera silla en la conducción de Contenidos Públicos al Ministerio de Educación, para que las señales vuelvan a cumplir lo que establece el artículo 141 de la Ley Nacional de Educación, ser educativos. Y era fundamental volver para poner orden.

-¿Con qué panorama se encontró al volver?

-Con la producción paralizada y compartimentos estancos, que responden a una política de desguace. Y también con los compañeros muy golpeados. Había mucho destrato con los trabajadores.

-¿Cuántas personas trabajan ahora en los canales?

-Contenidos Públicos tiene ciento sesenta y ocho personas. Responde a un proyecto productivo de vaciamiento. Canal Encuentro tiene doce personas, Pakapaka seis, DeporTV once personas. Más allá de las aéreas transversales, que abastecen a todos, las unidades específicas de los canales son mínimas.

-Es muy poco para volver a ponerlas en movimiento.

-El esquema de producción delegada que habíamos establecido, había generado veinticinco mil puestos de trabajo en PyMES audiovisuales. Hoy están en un estado de dificultad absoluta. Y le quitaron a las pantallas su potencia educativa. Pero las aulas mantuvieron vivos los canales. Los maestros no dejaron de pasar los contenidos. Teníamos un trabajo día a día con el Ministerio de Educación y los docentes que queremos recuperar, porque esa fue la potencia de los programas. No eran solo programas de TV, eran herramientas pedagógicas al servicio de una línea conceptual.

-También fue evidente la decisión de dinamitar la cuestión histórica…

-Se buscó deshistorizar los contenidos y el debate público en general. Si pensamos que hoy volvemos al FMI después de la crisis de 2001, es evidente que deshistorizar el debate público tiene una función social. Los canales reponían ese debate a nivel masivo: Encuentro, Pakapaka con ZAMBA y con mucha de su programación, y DeporTV incluso con el acceso al deporte no solo para quien puede pagarlo, sino con lo que fue Deporte Para Todos.

-La producción también fue desarticulada, siguiendo en esa línea…

-Argentina tiene record de egresados en carreras audiovisuales, es fundamental volver a producir con las universidades, por los contenidos y los talentos que generan. Recuperar las temáticas y la potencia de lo educativo. Que todo lo que digamos en la pantalla sirva a un propósito educativo, y a interpretar este nuevo tiempo. Las señales fueron referencia porque interpretaron su tiempo. Hoy tenemos el desafío de interpretar la actualidad con nuevo formatos, temáticas y perspectivas. La de género, si bien siempre la incluimos, no puede faltar. Tiene que atravesarlo todo, sobre todo en el deporte, tenemos que generar relatos audiovisuales actuales.

-¿Que percepción tiene sobre la recepción de los canales en la audiencia?

-Bueno, ni siquiera tenemos la medición de rating porque dejaron de medirlos. El sistema educativo y su público, es prioritario. Pero tenemos la vocación de llegar a todos los públicos. Algo básico para todo productor televisivo. Lo mismo que el concepto de audiencias, tenemos la vocación de llegar a todas las audiencias.

-Eso fue distintivo en Encuentro, donde los documentales dejaron de ser para un público cautivo del género.

-Nosotros queremos hablarles a los jóvenes, universitarios o no, a las amas de casa, a los adultos mayores. Queremos que los productos se destinen a todas las audiencias. Es el propósito y una vocación que no podemos perder. Sin salir de la lógica educativa, porque la divulgación es importante, pero somos una señal de televisión. 

-¿Que nuevas líneas conceptuales van a presentar en esta etapa?

-Las audiencias son nuestro norte y las concebimos como sujetos de derecho, con la especificidad de cada pantalla. En Pakapaka, es el derecho a la felicidad y a la alegría de nuestros niños. En un país con más de la mitad de los niños bajo la línea de pobreza, tenemos una responsabilidad histórica con ellos. En Encuentro, la egida educativa y la promoción del conocimiento. DeporTV para transformar valores vinculados a lo deportivo y al consumo del deporte no como negocio, sino como un derecho. Estamos viendo el caso de los rugbiers, esta es una gran oportunidad para promover comportamientos, no hay como la masividad del deporte para transmitir ideas.

-¿Sobre qué líneas deportivas van a profundizar?

-Vamos a trabajar sobre el futbol en conjunto con nuestro aliado y hermano que es la TV Pública, somos un esquema unificado. Pero con el compromiso de ir por el país y transmitir ligas de básquet, de vóley. Con la responsabilidad de mostrar disciplinas que no son visibles por una cuestión comercial.

-¿A Pakapaka vuelve Zamba, se actualizará el personaje?

-Mas que una vuelta, es una nueva etapa de Zamba, un relanzamiento y significa que hay un nuevo proyecto, para nuevas infancias. Zamba forma parte del patrimonio de Pakapaka, no solo es un personaje de TV, es un parque de diversiones, es musicales, es una marca de la infancia argentina.

-¿Ya tienen fecha de presentación para las nuevas programaciones?

-En abril haremos el relanzamiento. Nuevos rostros, nuevos talentos y líneas de trabajo como los crímenes de odio vinculados al machísimo, o el odio de clases. Promover la igualdad entre los ciudadanos. Donde la pelea y la violencia construyen masculinidades, tiene que estar el Estado para deconstruirlas. En vez de transmitir ese status quo, transmitir valores para educar y reflexionar. Es un trabajo que el Estado tiene que llevar adelante.

-¿Cómo están presupuestariamente?

-Mal, presupuestariamente mal, como el Estado. Pero no nos quejamos, tenemos que recuperarnos. Además dejaron deudas vinculadas al patrimonio de los trabajadores. Eso te pone en una situación de baja en la producción, pero estamos pensando contenidos en alianzas de coproducción. Y tenemos un equipo extraordinario con los directores de los canales: Maria Marta García Scarano en Encuentro, Cielo Salviolo en Pakapaka, Daniel Dátola en DeporTV, Juan Pablo Gugliota en CONTAR. Los lineamientos los pensamos en conjunto. Estamos contentos y entusiasmados.

En homenaje a Pepe Cazzola 

“Lo primero que hicimos fue ir a la asamblea –explica Tritten- y anunciar que vamos a cumplir las deudas preexistentes de paritarias. Porque estaban en asamblea permanente. Hubo retiros voluntarios y despidos, el 60% de las plantas se fue. Y nosotros tenemos que ordenar, con afecto y respeto por los compañeros que bancaron las señales. Nosotros los conocemos, sabemos quiénes son. Por eso decidimos antes de abordar los contenidos, regularizar la situación laboral de los compañeros. Queremos que vuelvan a estar felices, orgullosos de sus trabajos. Porque estos años no hubo un proyecto colectivo. Y en el camino perdimos compañeros como Pepe Cazzola, a quien conocí escribiendo justamente sobre las consecuencias del neoliberalismo en una serie hermosa e inicial del canal: Historia de un país”. Su muerte impactó a quienes conocieron su pasión por el trabajo. Tenía 44 años cuando tomo el retiro voluntario, se deprimió y su salud estaba frágil. “Siento el compromiso de no eludir el relato acerca de su muerte -se explaya Tritten – porque en su desolación esta la impronta del macrismo y la deshumanización”.