En las 162 instituciones de salud mental del país se encuentra internadas 12.035 personas, según el censo realizado el año pasado por el entonces Ministerio de Salud y Desarrollo Social, a cargo de Carolina Stanley. El trabajo, que figura en la página oficial del Ministerio, señala que el 75 por ciento de los lugares de internación son privados, pero sin embargo, en las 41 instituciones del sector público que fueron censadas, se encuentran alojadas el 52 por ciento del total de las personas registradas.

El promedio de edad es de 50 años, con una mayor incidencia de personas de entre 37 y 63 años, aunque también hay personas mayores de hasta 96 años y niños de 7. El 49 por ciento son varones, el 45 por ciento mujeres, y hay un 0,6 por ciento de personas trans o intersexual. Un 20,6 por ciento dijo no saber leer ni escribir, mientras que un 21 por ciento sólo contaba con cobertura pública de salud. Del total censado,el 66 por ciento dijo recibir visitas de familiares o personas conocidas. Sólo un 41,6 por ciento dijo haber podido realizar llamadas telefónicas. De este porcentaje, el 83,7 por ciento sostuvo que las llamadas fueron gratuitas, mientras que las restantes fueron pagas.

En cuanto a la realización de salidas, el 59,6 por ciento dijo que pudo hacer alguna salida en el mes anterior a ser censados, pero de esas personas el 69 por ciento tuvo que hacerlo acompañado. En cuanto a la firma del consentimiento para ser internados, el 28,5 por ciento dijo haberlo hecho. El 60.4 por ciento no lo hizo y del resto no se pudo tener información.

Sobre las razones por las cuales estas personas siguen internadas, el equipo que las trata informó que el 36 por ciento lo hace “por presentar riesgo cierto e inminente para sí o para terceros”. El tiempo de internación del 53 por ciento de las personas es de dos años o más, y un 25 por ciento de once años o más. El promedio general de internación es de 8,2 años, porcentaje que aumenta al 12,5 por ciento en las instituciones del sector público. De todos modos, se menciona en el informe oficial que hubo algún caso de personas que estuvieron internadas hasta 90 años.