Un estudio realizado por científicos de la Universidad de Yale y otros especialistas de New Haven, en Estados Unidos, sostiene que los desechos cloacales servirían para anticipar la curva de contagios del coronavirus. Los investigadores analizaron el lodo de aguas residuales primario durante el brote de covid-19 en un área metropolitana y verificaron que la evolución de las concentraciones de ARN del SARS-CoV-2 que encontraron fue similar a la que se dio días después en los ingresos a hospitales y en la confirmación de nuevos casos.

La demora en la aparición de síntomas y la gran cantidad de asintomáticos que trasmiten el virus sin saber que son portadores es una de las razones de alta propagación del SARS-CoV-2. En busca a una respuesta a esa problemática los investigadores que encararon el estudio en un área del noreste de Estados Unidos habitada por 200 mil personas. 

“Las decisiones para implementar o relajar las medidas y restricciones de salud pública requieren información oportuna sobre la dinámica de los brotes en una comunidad”, explicaron. También señalaron que “existe una necesidad apremiante de métodos adicionales para la vigilancia temprana y las estimaciones en tiempo real” sobre la evolución del virus de modo que las autoridades sanitarias “puedan y planificar respuestas” frente a la pandemia.

“El ARN del SARS-CoV-2 está presente en las heces de los pacientes con covid-19”, precisa la síntesis de la investigación y señala que el monitoreo de las aguas residuales sin tratar “puede proporcionar información sobre la prevalencia y la dinámica de la infección para poblaciones enteras” y que "se ha demostrado que contienen una amplia diversidad de virus humanos, incluidas las cepas de coronavirus que circulan habitualmente".

Los investigadores explicaron: “Como la eliminación viral puede ocurrir antes de que se detecten los casos, planteamos la hipótesis de que el curso temporal de las concentraciones de ARN del SARS-CoV-2 en el lodo de aguas residuales primario es un indicador principal de la dinámica del brote dentro de una comunidad atendida por la planta de tratamiento”.

Para realizar el estudio recolectaron muestras diarias de lodos primarios de la instalación de tratamiento de aguas residuales desde el 19 de marzo de 2020 al 1 de mayo pasados. Las concentraciones de ARN viral de SARS-CoV-2 encontradas se compararon cuantitativamente con los datos de ingreso hospitalario local y los datos casos de covid- 9.

“Nuestros resultados demuestran: la utilidad del monitoreo de lodo primario de SARS-CoV-2 para rastrear con precisión los brotes en una comunidad y las concentraciones de ARN de SARS-CoV-2 de lodo primario pueden ser un indicador principal sobre otros enfoques de epidemiología comúnmente utilizados”, señalaron los investigadores en las conclusiones de su estudio.

Según afirmaron, “el monitoreo del lodo primario es ampliamente aplicable” porque “Las plantas de tratamiento de aguas residuales con tratamiento primario y secundario son estándar en muchas regiones del mundo”.

“Nuestro estudio podría tener importantes implicaciones políticas. Las jurisdicciones pueden usar concentraciones de SARS-CoV-2 de lodos primarios para evitar dinámicas de brotes en la comunidad o proporcionar una base adicional para aliviar las restricciones, especialmente cuando existen limitaciones en las pruebas clínicas. La vigilancia basada en aguas residuales sin tratar y lodos es particularmente útil para países de ingresos bajos y medios donde la capacidad de pruebas clínicas es limitada”, dijeron también los investigadores.