El sector hotelero es uno de los principales afectados por la crisis de la pandemia. La cuarentena en buena parte del mundo redujo prácticamente a cero los viajes turísticos y laborales, mientras que el deterioro del empleo y los ingresos pronostican que los años que vienen también serán difíciles para la movilidad. Adicionalmente, hay una posible redefinición del negocio, porque se espera un fuerte incremento en la valoración que el cliente tiene por las medidas de prevención e higiene de las plazas, lo cual puede afectar a un gigante como Airbnb, que venía desplazando con rapidez a la hotelería tradicional. En la Argentina, "los hoteles están todos cerrados y estamos sobreviviendo gracias al ATP del Estado nacional, que permite pagar la mitad de los salarios, junto con el acuerdo con el gremio para reducir los sueldos hasta el 75 por ciento", explican desde Asociación de Hoteles, Restaurantes, Confiterías y Cafés.

Las estadísticas del sector muestran que en el mundo hay 700 mil hoteles que dan empleo a 173 millones de personas. Se calcula que el gasto global anual de viajeros es de 840 mil millones de dólares en estadías en hoteles. Los últimos datos de la Organización Mundial del Turismo muestran que los arribos de turistas cayeron un 57 por ciento interanual en marzo, lo cual implica una reducción de 67 millones de arribos internacionales. Se calcula que para todo el año, el turismo internacional caería entre un 58 a un 78 por ciento. En los hoteles, la caída en marzo en la comparación interanual ronda el 65 por ciento a nivel global. La relativa buena noticia para el sector es la paulatina recuperación de China, cuya capital, Beijing, es la ciudad con más hoteles del mundo, ya que contabiliza un total de 4169.

La crisis tiene impacto en todos los segmentos de la cadena turística, que en el rubro hotelería está dominado por un puñado de multinacionales. La compañía hotelera más grande es Marriott International, con 1,4 millones de habitaciones en todo el mundo. La firma suspendió a sus empleados en casi todos los niveles y la cotización de su acción en Wall Street pasó de 147 dólares a fines de febrero a 59 dólares el 3 de abril y ahora se ubica en 98 dólares, conforme la paulatina recuperación del mercado de China. La segunda multinacional hotelera a nivel global es Hilton. Su CEO, Chris Nassetta, detalló que en todo el mundo la empresa cuenta con 430 mil trabajadores, de los cuales el 60 por ciento está suspendido a causa de la pandemia. Espera que la demanda se recupere recién dentro de "tres o cuatro años”. En el caso de Hilton, la acción cotizaba 112 dólares a fines de febrero y se hundió hasta los 55 dólares a comienzos de abril, para ahora ubicarse en 83 dólares. En los Estados Unidos, el gobierno de Donald Trump lanzó un paquete de 2 mil millones de dólares de apoyo al sector turístico, con restricciones para el despido de personal y obligación de volver a contratar personal temporario.

En la Argentina, el Indec midió que en marzo se estimaron 2,1 millones de pernoctaciones en establecimientos hoteleros y parahoteleros, lo cual implica una disminución del 51,2 por ciento respecto del mismo mes del año anterior. Las pernoctaciones de viajeros residentes tuvieron una merma del 49,8 por ciento y las de no residentes, del 55,6 por ciento. "A partir del 10 de marzo, se cayeron totalmente las reservas en adelante. Hoy en día, los hoteles están todos cerrados. Recién días atrás en Jujuy abrieron algunos", explicó Ariel Amoroso, presidente de la Asociación de Hoteles, Restaurantes, Confiterías y Cafés. En la Ciudad de Buenos Aires hay 1026 establecimientos, de los cuales 25 prestan servicio para alojar a los repatriados, por lo cual el Estado paga 1000 pesos la noche. "Los hoteles tienen en líneas generales ingreso cero. Estamos sobreviviendo gracias al ATP del Estado nacional, que permite pagar un 50 por ciento del salario, mientras que se acordó con el gremio rebajar hasta el 75 por ciento el salario de bolsillo. También se acordó con el ENRE dejar de contratar potencia eléctrica y también se está conversando con Aysa", agrega Amoroso.

Más allá de la imposibilidad de viajar que todavía rige en muchos países, en el sector hotelero advierten que hay cambios que llegaron para quedarse. Por ejemplo, Hilton está desarrollando un check- online, mientras que las llaves de la habitación serían digitales y se obtendrían a través de una aplicación en el teléfono celular. “Ciertos elementos mecánicos de la experiencia serán digitalizados, pero eso estaba sucediendo de todos modos. Simplemente sucederá más rápido", indica Nassetta. Esta es una tendencia que se da en mucho rubros: la pandemia aceleró el camino hacia la digitalización. Por otro lado, se espera que el cliente preste mucha mayor atención a los protocolos de higiene. En ese sentido, una posibilidad es que el hotel vuelva a ganar atractivo en relación al alojamiento vía Airbnb. El CEO de Airbnb, Brian Chesky, consideró que “se comenzará reservando viajes más económicos más cerca de casa. Además, estamos comprobando que se pueden hacer muchas reuniones a través de videoconferencias y esto tendrá sin duda un gran impacto en la frecuencia con la que las personas viajan por trabajo".