La ciudad de Nueva York suspendió a 9000 empleados de distintos cuerpos que prestan servicio público por negarse a vacunarse contra la covid-19. La noticia fue comunicada este lunes por el alcalde Bill De Blasio, quien subrayó que representan poco menos del 6 por ciento de la fuerza laboral de la ciudad, que incluye a unos 400 mil empleados de servicios públicos.

"Tenemos aproximadamente 9.000 empleados en excedencia y sin salario, de un total de casi 400.000", indicó De Blasio en conferencia de prensa, y agregó que a esa cifra se debe sumar otros 12.000 funcionarios que solicitaron una exención religiosa o médica y están a la espera de una respuesta.

No obstante, el funcionario demócrata se mostró satisfecho al indicar que desde que ordenó la inmunización para los empleados de la ciudad, el 20 de octubre pasado, hay 22.472 nuevos vacunados entre el personal.

Al día de hoy, el 91 por ciento de nuestra fuerza laboral de la ciudad está vacunada, y sigue creciendo”, destacó De Blasio. En ese sentido, detalló: “Un 84 por ciento de los empleados en la Policía están vacunados frente al 70 por ciento que había cuando emitió la orden obligatoria, mientras que entre los bomberos la cifra es del 77 por ciento, un alza con respecto al 58 por ciento que había el pasado 20 de octubre”.

Por otra parte, el funcionario aclaró que todos los trabajadores suspendidos podrán incorporarse a sus cargos cuando lo deseen, siempre y cuando accedan a vacunarse.

"Queremos que todos hagan lo correcto: vacunarse. Cualquiera que no lo haya hecho hasta ahora, todavía existe la posibilidad de solucionarlo. Vacúnese, regrese al trabajo, porque necesitamos que todos hagan su trabajo y necesitamos que todos estén seguros", afirmó.

Hace un par de semanas, la ciudad ordenó la vacunación obligatoria para los trabajadores de servicios públicos, como la policía, el departamento de bomberos y la oficina de saneamiento.

La fecha límite para obtener al menos una dosis de la vacuna y evitar la suspensión sin salario, era el 1º de noviembre.

Epidemia de licencias para evitar la vacunación 

Al menos 2300 bomberos voluntarios de Nueva York han pedido licencia por enfermedad en reclamo por la obligación de vacunarse contra el coronavirus, informaron el lunes las autoridades.

"Las licencias por enfermedad aumentaron y sabemos que es una protesta contra esa norma. Es obvio", expresó el jefe de los bomberos de Nueva York, Daniel Nigro, en una conferencia de prensa. 

Y agregó: "Generalmente 200 personas vienen a diario a la oficina médica. La semana pasada eran 700 por día. La mayoría no estaban vacunados. Es totalmente inaceptable".

Al domingo la tasa de vacunación de los 17.000 bomberos de la ciudad era de 80 por ciento contra 60 por ciento al 19 de octubre, una de las cifras más bajas entre los servicios de la ciudad.