Aunque el reloj corre y ofrece solo un puñado de jornadas para instruir la acusación parlamentaria contra el fiscal Matías Edery, la diputada provincial Lorena Ulieldín comunicó que acepta el rol de elaborar el planteo disciplinatorio ante la denuncia de los fiscales Miguel Moreno y Pablo Socca a su colega por presunto encubrimiento a una miembro del clan Los Monos a quien aquel tenía como informante.

Esta semana se formalizó la aceptación de la legisladora socialista, pero recién la semana que comienza debería llegar a sus manos el grueso informe del auditor del Ministerio Público de la Acusación, Leandro Mai, para comenzar en base a ese documento la tarea de armar una acusación que en la Comisión de Acuerdos de la Legislatura podría derivar en graves sanciones para el fiscal investigado. 

"Esta semana sería la aceptación del cargo, aún no pude acceder al gran volumen de información que hay que estudiar y analizar", dijo ayer Ulieldín a la consulta de Rosario/12.

Por lo demás, la diputada oriunda de la localidad de Carlos Pellegrini se excusó de abundar sobre el tema. "Es prudente no emitir declaración alguna ya que no tengo los elementos aún para hacerlo. Es un caso difícil que merece un trabajo serio y responsable, y es lo que me propongo hacer desde el momento que asumo esta responsabilidad", cerró. 

Sin embargo, el tiempo la apremia. Lo grueso de la imputación de Moreno y Socca contra Edery se ventiló en la audiencia del mes pasado en la Comisión de Acuerdos de la Legislatura, Ulieldín deberá empaparse en pocos días del informe de Auditoría del MPA que confeccionó a instancias de la fiscal general María Cecilia Vranicich sobre Edery. Y para entonces, deberá presentar el 11 de diciembre a más tardar el corpus acusatorio para encarar la investigación disciplinaria contra el fiscal señalado. Un debate que se dirimirá en aquella comisión bicameral integrada por cuatro senadores y ocho diputados.

Edery fue acusado por sus colegas en una audiencia imputativa contra una célula criminal del entorno de Los Monos, por presunto encubrimiento a Mariana Ortigala, quien actualmente está imputada y presa por extorsiones a pedido del líder de ese clan, Ariel Máximo "Guille" Cantero.

Si Ulieldín no alcanza a concluir su acusación, el 10 de diciembre cumplirá su mandato parlamentario y deberá dejar la posta a otro dado que no renovará su banca. El caso volvería en la práctica a foja cero hasta que la comisión designe a otro legislador en el rol acusatorio.

El fiscal Edery, en tanto, se encuentra por estos días en uso de licencia "por motivos personales" según alegó ante el requerimiento de este diario. Y le restó trascendencia al asunto.  No será la única tormenta que deba enfrentar. También el mes pasado contraatacó el senador Armando Traferri, quien, ya sin fueros, pidió al MPA que aparte a Edery y a Luis Schiappa Pietra de la acusación en su contra en la causa de juego clandestino, y arrojó elementos para involucrarlos en la investigación sobre presunto espionaje ilegal contra el ex ministro de Seguridad, Marcelo Sain.