7 - EL BASTARDO
(The Promised Land/Dinamarca, 2023)
Dirección: Nikolaj Arcel
Guion: Nikolaj Arcel y Anders Thomas Jensen
Duración: 127 minutos
Intérpretes: Mads Mikkelsen, Amanda Collin, Simon Bennebjerg, Melina Hagberg y Kristine Kujath Thorp.

Estreno en salas

La traducción literal del título internacional es La tierra prometida, pero no parece muy “prometida” la tierra que obsesiona a Ludvig Kahlen, un hombre de origen humilde que hizo carrera en el ejército hasta llegar al cargo de capitán. La nueva colaboración entre el actor Mads Mikkelsen y el realizador Nikolaj Arcel luego de A Royal Affair (2012) comienza con este hombre parado ante el rey y sus asistentes para hacerles una oferta que difícilmente quieran rechazar. A fin de cuentas, la región de Jutland es un páramo del que nadie logró sacar un cultivo, y Kahlen no quiere un céntimo para intentarlo otra vez, ahora con las papas. Como compensación por la posibilidad de que lo logre pide una porción de esas tierras y un título nobiliario que tape su origen plebeyo.

Preseleccionada por Dinamarca para competir por el Oscar a Mejor Film Internacional, carrera en la que llegó hasta el pelotón de quince del que salieron los cinco que disputaron esa categoría el domingo, la película se presenta como un drama de época centrado en esa aventura agricultora en los confines daneses. Como no hay mucha mano de obra a la vista, debe contentarse con los servicios de una pareja de campesinos en busca de refugio primero, y los de un grupo de gitanos después. La mayoría es tan pobre como él, generando así una comunidad de desclasados. Clase es, justamente, lo que quiere Kahlen. Que esté más interesado en el reconocimiento que en el dinero lleva a pensar que las papas no son un fin en sí mismo, sino el vehículo para ganarse los títulos y el respeto que de otra forma no podría obtener.

Su linaje lo vuelve detestable ante quienes detentar el poder en Jutland. El más encolerizado es De Schinkel, un terrateniente devenido en gobernador convencido de que lo suyo es mucho más que una autoridad pasajera. Lo más interesante de ese personaje no es tanto su villanía extrema, ejemplificada en la ejecución pública del hombre que osó ponerse al servicio de Kahlen, como la manera en que ella lo empuja hacia la locura y la soledad, al punto de convertirlo en un líder mesiánico que termina vociferando sus verdades a los pocos fieles que se mantienen con él.

No es el único problema para Kahlen, un hombre curtido y de una ética tan inquebrantable como la del arquetipo cinematográfico de cowboy norteamericano. Adaptación de la novela Captain and Ann Barbara, publicada en 2020 por Ida Jessen y basada muy libremente en hechos reales, El bastardo irá incorporando elementos del western a la dinámica comunitaria. Un héroe enfrentado a casi todo, claro, pero también las tomas panorámicas que grafican la inmensidad de la península y la capacidad de la naturaleza de imponer sus condiciones. Así lo demuestra con las primeras heladas de un invierno que amenaza con dañar de muerte los brotes que laboriosamente surgieron de la tierra que Kahlen aró con la viuda del ejecutado (e inevitable interés romántico, la subtrama menos interesante del film) y una niña morocha a la que nadie quiere cerca por las supuestas maldiciones que trae.

Lo místico es uno de los condimentos que utiliza Arcel para saborizar un relato que funciona como drama romántico-social y retrato de un hombre cuya tenacidad espartana le puede dar el status del que carece. El bastardo no sería lo que es sin el rostro tallado en piedra y la mirada siempre tristona y melancólica de Mikkelsen, que  vuelve a demostrar su talento transmitiendo las complejidades del mundo interno de Kahlen con más gestos que palabras.